Mermelada de higo


La mermelada es uno de los manjares más ricos que he probado. Su sola mención ya poetiza la mente y su variedad es deslumbrante. Su secreto es la pectina: una sustancia que contienen algunas frutas

¿Cómo se hace?
Aunque las proporciones de fruta y azúcar varíen dependiendo del grado de maduración de la fruta -entre otros factores- suelen ser mitad y mitad cuando esta es casera. Una vez alcanzado los 140ºC la pectina y el ácido de la fruta reaccionan con el azúcar haciendo que se solidifique la mezcla, obteniendo así nuestro confite.


Mi favorita y sus combinaciones


Mi predilecta es la de higo y por desgracia, al ser un producto de temporada –otoño- no la puedo disfrutar todo el año. Es dulce de la manera más agradable posible, sabe a bondad y no a golosina. Su textura suave conmulga a la perfección con las pepitas de la fruta. Además, su cuerpo, aspecto y sabor la hace una gran candidata para ser acompañada o servida con cualquiera de estos alimentos:

            -Solomillo
            -Foie
            -Quesos curados, cremosos y verdes o azules.
            -Queso
            -Nueces
            -Yogur
            -Tostadas con mantequilla
            -Una copa de vino

Sus propiedades
Se trata de un producto indispensable en una dieta habitual dado su gran aporte energético y su contenido en  fibras, potasio, hierro y Vitamina C.  Además, no contiene grasas, ni colesterol, ni sodio.

Algunos de sus beneficios son:
 -Se trata de una fuente de nutrientes y energía para el organismo 
 -Corrigen trastornos digestivos y estreñimiento crónico gracias a la cradina
-Aumentan la densidad y facilitan el correcto desarollo de los huesos por su alto contenido en calcio
-Reducen los problemas de dolores menstruales y de anima al ser rico en hierro
-Son los encargados de combatir los riesgos de sufrir trastornos cardiovasculares por su alta concentración en polifenoles

Por último
Espero que la probéis y que os 

2 comentarios:

  1. ¿Alguien ha dicho camembert y tostadas?

    8)

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  2. La próxima vez con Gorgonzola para ver el contraste. La próxima entrada creo que versará sobre él.

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