El queso Gorgonzola

El queso Gorgonzola es uno de mis favoritos, de mis predilectos, de mis preferidos y de mis más amados. Es uno de los más rechazados a simple vista -por su aspecto enmohecido y azulado y por su fuerte olor- pero para mí es como la niña de mis ojos. 
No me resulta extraño que goce con Denominación de Origen Protegida y que diversas ciudades italianas disputen para ver cuál es su procedencia geográfica definitiva. 

¿Cómo se hace?
Para que la leche de vaca fermente se emplea un hongo -Penicilium roqueforti- y se deja reposar de 2 a tres meses, dependiendo de la variedad que queramos. A continuación, durante el proceso de curación del suero se introducen barras para que en las cavidades proliferen los mohos, todo esto a baja temperatura. Gracias a esto aparecen las vetas azules y su color queda parecido al del mármol. Según la consistencia que queramos reposará más o menos tiempo.

Sus variedades y  combinaciones


A pesar de que tiene tres variedades -el blanco, el dulce y el picante- siempre es recomendable tenerlo a temperatura ambiente por lo menos una hora antes de su consumo, para su sabor y cremosidad no se vean modificados. 
El primero es el más tierno y no contiene hongos. El segundo -el dulce- está ligeramente jaspeado y es muy suave, aunque tiene un toque picante. Y por último, el tercero, contiene con hongos más desarrollados. Su sabor fuerte es característico y preciso. Todos ellos combinan tanto con dulce, como con salado.

Bien es cierto que se puede comer solo con un trozo de pan calentito, pero también podemos echar nuestra imaginación a volar y combinarlo o utilizarlo en diversas recetas. Algunas ideas:

- Empanadillas de manzanas ácidas, nueces y gorgonzola
- Pasta con una salsa de gorgonzola, ralladura y zumo de naranja y pimienta negra
- Ensalada de rúcula, nueces, sésamo, tomate, uvas, fresas y gorgonzola.
- De acompañamiento o en salsa con espárragos, carnes rojas o manzana.

Por último
Espero que lo compréis y que se realice el sueño de muchos: Comer sin engordar.

 ¡Bon Appétit!

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