El Mango

Investigando e investigando sobre el DNI del Mango, he encontrado su categoría taxonómica -cada una de las subdivisiones de la clasificación biológica, desde la especie, que se toma como unidad, hasta el filo o tipo de organización-. Mi fruta antioxidante favorita. 

Para aquel quiera saberlo, pertenece al reino de las plantas y su filo es el magnoliophyta. Su clase la Magnoliopsida, su orden Sapindales y su familia Anacadiaceae. Su género es Mangifera y su especie es la Mangifera Indica -su nombre binomial-.

            Me cautiva

  Me deleita su olor, hace que sea una de las frutas tropicales por excelencia. Su sabor es exótico, dulce y nada empalagoso. El color de su pulpa es amarillo intenso y su piel puede ser verde, amarillo o rosácea dependiendo de la especie y maduración. Su peso varía desde 150 gramos hasta los 2 kilogramos y su forma es ovalada o aplanada.

Aunque hayan algunas zonas de España -Málaga y Granada- con importantes producciones y se pueda adquirir durante todo el año, la mejor época para comprarlo es el invierno. He visto que su conservación mejora si los frutos son sometidos a un pre-tratamiento por calor, a 38ºC, antes de aplicar bajas temperaturas -5ºC-. Eso sí, los largos almacenajes disminuyen su contenido de azúcar y ácidos.

            Sus propiedades

  Pese a que su composición sea distinta según la variedad, su elevado contenido en agua es notorio. 

Su valor calórico también es elevado ya que aporta una gran cantidad de hidratos de carbono. 

Aporta fibra que mejora el tránsito intestinal.

El potasio es un mineral necesario para la transmisión y generación del impulso nervioso y para la actividad muscular normal, interviene en el equilibrio de agua dentro y fuera de la célula.

El magnesio se relaciona con el funcionamiento de intestino, nervios y músculos, forma parte de huesos y dientes, mejora la inmunidad y posee un suave efecto laxante. 

El beta-caroteno se transforma en vitamina A en nuestro organismo conforme éste lo necesita. La vitamina A es esencial para la visión, el buen estado de la piel, el cabello, las mucosas, los huesos y para el buen funcionamiento del sistema inmunológico. 

La vitamina C interviene en la formación de colágeno, huesos y dientes, glóbulos rojos y favorece la absorción del hierro de los alimentos y la resistencia a las infecciones. 

            Combina...

            Con multitud de cosas. También se puede tomar solo. Jugando con las vocales he encontrado algunas ideas: Mora, Manzana, Maracuyá, mousse de yogur, migas; Alvariño, Abacanto, albondigas de pollo, Almendras; Nuez, Naranja; Galletas, Guacamole, Gambas; Oporto y Ostras.

Como a mí más me gusta es en ensalada de canónigos, fresas, zanahoria, gulas y sésamo. También casas con Gorgonzola, con una crema de foie y coliflor o en la rica gelatina.

          ¡Bon Appétit!